domingo, 13 de febrero de 2011

Dar clase


     "Dar clase es, en el fondo, como hacer el amor. Es exaltante, agotador, todo lo que quiera, pero, en el fondo, es algo que no se hace a solas. Yo no voy a clase para soltarles mi saber. Voy para vivir con ellos durante tres cuartos de hora o una hora, a menudo mucho más, sin que se den cuenta de que el tiempo ha pasado. ¿Por qué? Porque nos encontramos bien juntos. Evidentemente, tengo una suerte inaudita: carezco de programa. Pero, a decir verdad, nunca deberíamos tener programas. Nos encontramos ahí para convivir y, de paso, para aprender cosas, porque la necesidad de conocerlas se impone con toda naturalidad. Le garantizo que pasamos así, sin problemas, de las matemáticas a la poesía. Sin duda, es necesario que el profesor esté ahí para vivir con sus alumnos. Eso es todo, y que se sienta feliz de hacerlo. No puede llegar abatido"
Albert Jacquard

No hay comentarios:

Publicar un comentario